
En las últimas horas, en el municipio de Marinilla, gracias a un reporte ciudadano fue rescatada una ardilla recién nacida huérfana por la corporación Cornare.
Según información, el individuo ingresó al hogar de paso sin fracturas, con una leve deshidratación y con una lesión superficial en miembros posteriores. Por ahora se encuentra siendo atendida por profesionales del equipo de fauna en convenio con el Área Metropolitana quienes deben brindarle alimentación asistida y un ambiente adecuado para su total desarrollo.
Hasta el momento, el animal ha venido evolucionando satisfactoriamente, se espera que termine su desarrollo y adquiera destrezas motrices para la siguiente etapa de readaptación.
Las ardillas son de tamaño pequeño, de entre 38 a 45 cm de longitud. Sus patas son cortas, pero fuertes. Mediante sus uñas curvadas y afiladas, se agarra a la corteza cuando salta de un árbol a otro (son auténticas acróbatas). La cola le ayuda a mantener el equilibrio cuando anda por las ramas. Su buena vista le permite calcular bien las distancias.
Se pueden encontrar en bosques y también en parques de las ciudades. A pesar de ser expertas escaladoras, suelen bajar al suelo para buscar alimento como frutos secos, bellotas, bayas y flores. También comen corteza, huevos o pájaros pequeños.