
Tres hospitales del Oriente, entre los 37 que suspenderán servicios a usuarios de Nueva EPS por falta de pagos
Este lunes, la Asociación de Empresas Sociales del Estado (AESA) de Antioquia informó que 37 hospitales públicos del departamento suspenderán la prestación de servicios de salud no urgentes a los usuarios de la Nueva EPS, debido a los pagos pendientes por parte de la entidad. La decisión entrará en vigor este martes, 17 de diciembre.
Según Luis Hernán Sánchez Montoya, director de AESA, la deuda acumulada por la Nueva EPS con estos hospitales durante diciembre asciende a $170.000 millones de pesos, lo que ha impedido a las instituciones de salud cumplir con obligaciones laborales, como el pago de salarios y primas de Navidad, así como el pago a proveedores.
“Los hospitales se ven obligados a suspender servicios no urgentes ante la falta de recursos. Hacemos un llamado a la Nueva EPS para que se ponga al día con los pagos, de lo contrario, la suspensión de servicios se mantendrá hasta que se normalicen las obligaciones financieras”, expresó Sánchez.
La medida incluye la suspensión de servicios como consultas médicas generales y especializadas, odontología, laboratorios clínicos, entrega de medicamentos y procedimientos electivos no urgentes. Los hospitales afectados están ubicados en 37 municipios del departamento, entre ellos Medellín, Bello, Sabaneta, Girardota, Itagüí y Caucasia. También se incluyen localidades de difícil acceso como Murindó, Vigía del Fuerte y Yalí.
Los municipios donde se aplicará la medida son: Alejandría, Angostura, Anzá, Bello, Betulia, Briceño, Caicedo, Campamento, Caramanta, Carolina del Príncipe, Caucasia, Don Matías, Ebéjico, El Bagre, Girardota, Heliconia, Hispania, Itagüí, Jericó, La Unión, Maceo, Medellín, Montebello, Murindó, Nechí, Peque, Sabanalarga, Sabaneta, San Andrés de Cuerquia, San Francisco, Uramita, Valdivia, Valparaíso, Vigía del Fuerte y Yalí.
En Antioquia, alrededor de 2 millones de personas están afiliadas a la Nueva EPS, de las cuales el 80% pertenece al régimen contributivo. La Nueva EPS, que cuenta con más de 10,8 millones de afiliados en el país, fue intervenida por el Gobierno Nacional a través de la Superintendencia de Salud en abril de este año debido a sus problemas financieros y administrativos. Desde entonces, la situación de la aseguradora ha empeorado, con un incremento significativo de sus deudas.
Un informe reciente del congresista Andrés Forero reveló que la deuda superior a 180 días pasó de 89.016 millones de pesos en marzo de 2024 a 935.780 millones en octubre, un aumento del 951%. La cartera total a seis meses subió de 139.557 millones a 813.302 millones en el mismo periodo, lo que representa un incremento del 482%. Este panorama crítico ha impactado directamente la prestación de servicios de salud en Antioquia, donde los hospitales públicos dependen de los pagos de las aseguradoras para mantener su funcionamiento.
Por otro lado, Audifarma, el gestor farmacéutico encargado de dispensar medicamentos a los afiliados de la Nueva EPS, había anunciado previamente la terminación de su contrato con la aseguradora debido a una deuda superior a $600.000 millones de pesos. Sin embargo, un acuerdo reciente permitió restablecer el servicio de entrega de medicamentos, lo que representa un alivio temporal para los usuarios.