El pasado 18 de agosto, en zona urbana del municipio de Sonsón, un hombre fue requerido por la Policía al percatarse de su extraño comportamiento. Al momento de ser requisado encuentran cartones de huevos envueltos, que contenían 100 alacranes.
El hombre de 50 años se presentó a los Policías como un Chamán, y les dijo que los alacranes serían usados por él para hacer medicinas artesanales. A lo cual los agentes policiales le solicitaron el permiso de salvoconducto emitido por Cornare, que permite que él porte, y movilice, estos especímenes.
Al no contar con un permiso emitido por la autoridad medioambiental, la policía procedió a capturar al sujeto y poner en salvaguarda de Cornare los 100 alacranes.
Se presume que estos alacranes de la especie tityus antioquensis, iban a ser comercializados en los mercados de tráficos de especies. Estos alacranes son nativos de Antioquia, y habitan principalmente en el páramo de Sonsón, frágil ecosistema del cual fue extraída esta especie.
Ahora en hombre deberá responder ante un juez, por tráfico de fauna, violación contemplada en el Código Penal, Artículo 328A.
“El que trafique, adquiera, exporte o comercialice sin permiso de la autoridad competente o con incumplimiento de la normatividad existente los especímenes, productos o partes de la fauna acuática, silvestre o especies silvestres exóticas, incurrirá en prisión de sesenta (60) a ciento treinta y cinco (135) meses y multa de trescientos (300) hasta cuarenta mil (40.000) salarios mínimos legales mensuales vigentes”.
